¿Por qué se se ha planteado una estructura de cuatro festejos y no cinco?
La situación económica, según apuntan algunos expertos, no va a ser buena a partir de septiembre u octubre, y lo que hemos hechos ha sido anticiparnos en el tiempo. Así posibilitamos que el abonado tenga la máxima calidad ahorrándose unos euros. Después de estar con el abono parado dos años, se trata de volver a crear ese hábito, en el que el aficionado no solo viene a una corrida de toros, sino a un evento social. La política de calidad y buenos precios nos ha funcionado siempre bien y por ahí vamos a seguir.
¿Cómo ha respondido el abonado a esa llamada?
Hemos superado las cifras de 2019, que era algo con lo que yo soñaba cuando estaba elaborando los carteles. El objetivo que perseguíamos era que todo aquel al que le guste ir a los toros a Cuenca, cuando mirase los carteles, pensara “¡tengo que sacar el abono sí o sí!”. Eso se ha cumplido y volvemos a estar en lo más alto. Con un festejo más habríamos bajado la calidad… Creo que hemos acertado y los números lo demuestran.
¿Cree que ha dado en la tecla de la estructura perfecta? Según sus palabras, parece que Cuenca igual tendría que quedarse en cuatro tardes…
De momento, en 2022, sí. Vamos a ver qué sucede durante la feria para valorar en 2023. Cada año es muy diferente porque las circunstancias de una feria no dependen solo de la anterior, hay una parte que depende de cómo va la sociedad económicamente hablando. ¿Podemos tener otro festejo más? Veremos a ver la afluencia final de público con las entradas sueltas, pero lo más importante es que haya normalidad económica en la calle. Como sospecho que la situación el año que viene va a ser delicada, tendremos que analizarlo este invierno.
¿Cómo ha hallado la cuadratura del círculo para contratar a los toreros más caros del escalafón?
Se trata de hacer un evento atractivo y lo hemos conseguido. Un buen amigo me decía que el problema de esta feria no es a quién traes más, sino a quién quitas para que ese venga… En la feria están todos los mejores del escalafón actual. Además, desde hace década y media, los precios son más económicos que en cualquier otra feria y al final esa política da resultado.
Eso es pensar a largo plazo y no a corto, que es lo que no suele predominar…
Incuso no teniendo contratos tan largos como éste, siempre he pensado igual. Cuando la tauromaquia funciona, a ti va bien, estés tú o no al frente de la plaza. Tienes que trabajar de cara a futuro. Si trabajas pensando solo en ese momento concreto, con precios inasumibles para muchos bolsillos, es triste. Nosotros no defendemos media plaza a precios altos; defendemos un espectáculo con mucho volumen de público y buen ambiente. Si la política de otros es hacer caja a corto plazo e irse, que no pasen por aquí porque para eso no estamos.
De los carteles, ¿por qué la mixta?
No hemos anunciado una mixta porque nos haya dado la gana… todo tiene su motivo. Es uno de los mejores rejoneadores de todos los tiempos y está en esa mixta porque abre cartel a Talavante y Roca Rey, nada menos. Es decir, no estamos haciendo una mixta al uso, sino la mejor que se puede hacer en este momento. He preferido hacer una mixta que no colocarles a mis abonados un pegote por delante de Talavante y Roca Rey.
¿Cómo se convence a Morante para que mate Rehuelga? ¿No es uno de los carteles más redondos en su carrera?
Ha habido carteles muy buenos [risas]. Como aficionado, es uno de los que más me gusta en estos 24 años. No he tenido que convencer a nadie; me han convencido ellos a mí. Cuando el año pasado lidio Rehuelga en Illescas, uno de los primeros en llamarme es Morante para decirme que quiere matar una de ese hierro. Cuando ya está Morante, entra Aguado, que es muy amigo del ganadero y le apetecía. Y Emilio de Justo cortó cuatro orejas en esa corrida de Illescas.
¿Tomás Rufo es uno de los debutantes más consolidados de estos últimos años?
Tomás Rufo es una de las grandes atracciones de la tauromaquia en 2022. Triunfador en Madrid, Sevilla, Valencia y en todas las plazas importantes. Además es el único castellano-manchego de los carteles y viene porque se lo ha ganado. Ojalá todos los años vinieran estas bocanadas de aire fresco para sacudir el escalafón.
¿El ganadero José Vázquez merece estar anunciado de nuevo en la feria?
Me pareció entretenida al corrida de 2021 y por eso repite. En 2019 no fue buena, pero hubo un toro al que le pidieron el indulto y luego El Juli lo pinchó. Y en los años anteriores siempre ha habido tres o cuatro toros que han embestido mucho. Si marcamos ese nivel ganadero, lo vamos a tener complicado… Por un año en el que no haya salido bien, no le vamos a poner fuera porque nos ha dado muchas alegrías. Soy de los que da las oportunidades justas y a los que se las ganan, y él se las ha ganado.
¿Cómo renueva ilusiones año tras año?
La única ilusión que tengo es ponerme en la piel de mi abonado. Cuando hago los carteles siempre me pongo en su pellejo y me pregunto qué me gustaría ver. Y eso es lo que hago cuando confecciono las combinaciones. Soy aficionado antes que cualquier cosa, y a partir de ahí, no cambio cromos, no llevo cuatro toreros como otras empresas, ni me dedico a que me inviten a los callejones.